domingo, 15 de abril de 2012

Vingt-trois mois mon cher.

Hay días así. Días que no se sienten, cuando cruzan nuestra vida sigilosos. Días que se vuelven viento. Estos días insolentes en los que tu ropa se ajusta y mi cuerpo se descuelga.
Eres tú el que me has creado, el que me rompió y moldeó según tus labios, tu mirada, tu sonrisa y tu calor. Todo lo anterior a ti me suena estúpido, y aunque pueda ofrecerte todo, todo es poco.
Es todo ese ruido que en mi mente se disfraza de tu voz, y me miente. El mismo que hace de una frase una guerra. Hace de una vida una excusa, y sin dejar de lado esos recuerdos que hacen de tu cuerpo y el mío un espectáculo.
Y es que es la noche la que dice todo sobre ti, y ayer me susurró que a veces, sólo a veces vale más cualquiera de tus besos en una de mis mañanas que todas nuestras caricias juntas.

1 comentario:

  1. Me gusta mucho tu blog :)
    Soy nueva en esto, ¿puedes pasarte por el mío y decirme qué te parece porfis? Aunque todavía no hay mucho. Gracias :)

    ResponderEliminar